Le puse la cara, querida arbostar, ya que te importa.
BENDITOS son los que tienen la oportunidad de conocer a Federico (nombre del arte). Realmente es un niño de oro, pero no tanto porque esté por Dios, sino porque es una persona sincera, también autocrítica, dulce y que tiene más. Si tuviera la oportunidad, la mantendría de la mañana a la noche sólo para poder hablar entre sí, salir, ver una película acurrucada en el sofá, ¡me casaría con él!
Tal vez, como dicen de las partes en las que vivo, el "rayo" es como para llevarte a hacer comentarios de un cierto tenor. Pero, como dice un viejo proverbio, los que desprecian compran, e incluso a un alto precio ;)
Una fe de beso, no te bajes a su <3
te amo